miércoles, 21 de septiembre de 2016

Te doy permiso para hacer lo que quieras

Un grupo de amigos de muchos años organiza, un sábado a la noche, una cena con birras y pizzas para ver fútbol. Como de costumbre, el único que había avisado que no podría ir era el casado.

Sin embargo, cuando estaban a punto de comer la primera pizza, lo ven entrar muy alegre. Ante el estupor de todos, que le preguntan cómo lo logró, contesta:

-Fue milagroso. No lo van a creer. Yo estaba sentado en el sofá de casa y me tapan los ojos. Cuando me los destapan, ahí estaba mi mujer. Tenía una transparencia que se había comprado ese día, sin nada debajo. Me agarró de la mano, me llevó al dormitorio. En la cama había pétalos de rosa, y toda la habitación llena de velas aromáticas. Entonces ella se desnudó del todo, me dio unas esposas que también había comprado ese día en un sex shop, y me dijo:

"¡Atame a la cama y te doy permiso para hacer lo que quieras!"

- Y bueno, la até y acá estoy. ¿A qué hora empieza el partido?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario