Regateo en tiempos de crisis

Un marido que por la crisis estaba con problemas financieros no tuvo otra idea que prostituir a su mujer. La esposa muy confundida le dice:
– ¡Pero yo no sé nada de eso!.
Y él le dice:
– Cuando tengas una duda sólo me preguntas, yo voy a estar atrás de aquel poste.

Así quedaron. Llegó la primera noche y la mujer se vistió bien apretadita y escotadita. Ella parada en la esquina y el marido detrás del poste. Llegó el primer cliente en un automóvil 0 km. Se para en donde está la mujer y ella se le acerca.

– ¿Cuánto…? - le dice el cliente.
– Bueno… ehhh … no sé…. espéreme aquí… - Y corre detrás del poste.

– Che… ¿cuánto…?
El marido le dice: – A ver, ehhh … decile que… a ver… Tiene un buen auto… dile que $500.

La señora vuelve con el cliente y le responde: – $500
Y él le dice: – Sólo tengo 100…
Entonces la mujer le pide nuevamente: – Espéreme…

Y corre con el marido detrás del poste. – Che… sólo trae $100…
Y le contesta el marido: – No, no, decile que entonces sólo sexo oral.

La mujer corre otra vez con el cliente y le dice: – Bueno, sólo sexo oral.
Responde él: – Ok, está bien…. ¡Súbase!

Y el tipo empieza a bajarse el cierre del pantalón…….
La mujer, sorprendida, exclama: – ¡¡¡WWOOOOOOOWWWWW…!!! ¡Espéreme acá…! ¡Vengo rapidito!

Se baja del auto y corre hacia su marido y le dice:
– ¡¡¡No seas malo!!! ¡¡¡Préstale los $400 pesos!!!