jueves, 31 de octubre de 2013

Gato homicida



Un hombre entra a un bar y se dirige a un cliente:

- Hola, buenas, ¿es suyo el perro que está atado ahí fuera?

- Si, es mío, ¿por qué?

- Pues porque mi gato lo ha matado.

- ¿Cómo? ¡Eso es imposible, si mi perro es un rottweiler gigantesco!

- Correcto... y mi gato es hidráulico.

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