Cuando tenía 12 años, mi padre me obligó a ir al velorio de un amigo suyo que yo no conocía.
Cuando llegamos, me coloqué en un rincón del salón esperando la hora de volver a casa. En ese ínterin un hombre se me aproxima y me habla:
- Niño aprovecha la vida, sé feliz porque yo no la aproveché. - Pasó la mano por mi cabeza y se retiró.
Mi padre, antes de retirarnos, me obligó a despedirme del muerto. Cuando miré dentro del cajón me asusté, porque estaba el hombre que me habló minutos antes.
Pasé a no conseguir dormir durante mucho tiempo. Sufría de pánico, quedarme solo. Iba al Psicólogo, no apagaba la luz por la noche . . . . .
Años después descubrí algo increíble que cambió mi vida.
Aquel muerto hijo de puta, tenía un hermano gemelo . . . 😎😎😎🍻🍻🍻🍻
No hay comentarios.:
Publicar un comentario